El Páramo (2x09)
Juan estaba mirando al Presidente. Se sentía representado de solo mirarlo. Era un tipo que desprendía una energía moral o algo así. La lluvia le acompañó y todo el campamento olía horrible, era una lluvia sin radiación que había purificado el campamento.
La limpieza de la atmósfera influyó a los campos de cultivo. Se iba a plantar arroz y para ello una fábrica de procesado se tenía planeada también. El Presidente Rodrigo pondría el segundo reactor de fusión en los planos de la fábrica.
Arroz automatizado en la ciudad y campos bastante fértiles a partir de esa lluvia. La receta perfecta junto al desarrollo de las infraestructuras de La Unión.
Alejandra desarrolló un mecanismo para hacer cuentas con un ordenador de acero y cobre dentro. Un ordenador binario de cálculos para la industria nueva. Proyectaba un número y otro, y luego la operación binaria de sumar o restar.
Con el sector público creciendo se creó una empresa de correos a pérdidas. Correos La Unión se fundó y ahora se mandaban cartas a otros lugares fuera y dentro entre el pueblo, que lo uniría aún más por el desarrollo y la legitimidad de una nueva era para La Unión.
Ezequiel estaba confuso y Juan lo apoyaba. Había escrito en un papel como se sentía tras ver tanto desarrollo a la vez que veía a los psicópatas tener una ciudad para ellos y ser muy violentos.
Juan lo animó a combatir y elevar su autoestima.
La valentía de Juan lo contagió y fueron a una operación especial. Tenían que recuperar la ciudad de los psicópatas tras una revuelta violenta con 2 soldados más. Reducción de resultados y luego entraría todo el ejército tras el aguijonazo de Juan etcétera.
El apoyo fundamental fue el anhelo de, al menos, tener algo con Alejandra que tomó una decisión política para definir su orientación sexual, un poco extraño pero el mundo tenía esa costumbre.
Acabaron con francotiradores y escopetas automáticas con 28 psicópatas causando un caos tremendo y desorientador.
Después todo el ejército entró y acabaron con 77% de los psicópatas restantes.
Los demás pedían piedad en total 97 psicópatas. El plan era el siguiente:
Crear un muro dentro de la ciudad psicópata para aumentar La Unión con los ciudadanos empáticos y los psicópatas estarían en la otra parte del muro, siendo ya muchos menos. Acabarían desapareciendo con las operaciones especiales y las pugnas en la estrategia desgaste y conquista, tiempo al tiempo...
Juan y Alejandra empezaron a mandarse cartas.....